En un contrato de bienes raíces vamos a tener tres elementos que deben de darse para que el mismo este completo y pueda ejecutarse frente a terceros, siendo aquellas personas naturales como nuestros vecinos o personas jurídicas como las empresas, que deben de estar recogidas e inscritas ante la ley para poder tener capacidad de obligarse.
Ahora bien, estos tres elementos son la voluntad que podemos entenderla como la capacidad de decisión que tu como personas posees, y no está sometida a ningún tipo de presión externa como el peligro de tomar una decisión porque tu vida corre peligro o estas amenazado. Si este fuera el caso no sería una decisión válida y podría quedar sin efecto a través de los medios legales oportunos.
El segundo elemento es el objeto, que en este caso será la propiedad inmobiliaria. Es importante saber que solo por el hecho de que sea propiedad inmobiliaria no significa que podamos hacerla parte del contrato, pues no podemos vender El Capitolio. Ya que es un bien público, por lo que este bien inmobiliario debe de ser coherente, de acuerdo a las leyes del estado en que se encuentra la realización del contrato.
El tercer elemento es el precio, ya que debe de ser un precio justo por el objeto al que hemos accedido a realizar el contrato y obligándonos con nuestra voluntad, ya que si el precio es falso como el hecho de que no sea en la moneda adecuada o injusto puede dar lugar a la invalidez del contrato.
Cuando realices un contrato ten en cuenta estos elementos. Este no es un concejo legal por lo que ante cualquier cuestión consulta con un abogado para un asesoramiento legal.
Comments